10366741323_438fd24e9aLas emociones y sentimientos hacen reavivar las llamas de la esencia de una marca. La mayoría comenta que se puede vender sin emociones, que ofrecer el producto necesitado por el cliente es suficiente, no existe en su manual de marca suscitar suspiros y traspasar la barrera material.

Sin más ofrecen al mercado sus productos, olvidan a la persona que se sitúa debajo del consumidor, no hay más es un simple producto y un simple cliente, no existe la reciprocidad, no hay interacción, no hay conversación ni muestras de amor entre marca y persona, no busquen más porque no les interesa.

Debemos irrumpir en el mundo del producto «hueco» y romper el frío vacio, hay que ofrecer algo más, un sentimiento, una cultura, hay que crear un engagement que sea la antesala del branding emocional, debemos ser personales y estrechar los lazos con el consumidor, borrar de nuestro manual la simple venta y compra y dar un paso más hacia la humanización y socialización de las marcas.

Hoy más que nunca se necesita los sentimientos, reavive tu esencia y comparte momentos únicos e inolvidables, practica el marketing de los cincos sentidos, ya no basta con lo material, se busca y se necesita el plano emocional, despertar los sentidos y alimentar el alma con emociones.

Es tiempo de desaprender, de desandar lo andado y volver a los inicios, busca algo más en el interior de la marca, abre el cofre de los sentimientos y conecta con el «Yo Interior» de los consumidores.Es la hora de conquistar y cautivar al cliente, de salir en su búsqueda.

Porque una marca con sentimientos, es una marca que te ama.

Photo credit: Kristina Alexanderson